Todo el mundo habla de la belleza indiscutible de Toledo, una de las ciudades más antiguas de Europa. ¿Qué de cierto hay en eso?

Nada más lejos de la realidad, Toledo es una ciudad única, imprescindible de conocer dentro del territorio español. Declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1986, conserva su arquitectura medieval casi intacta, dentro de lo que cabe, y recorrer sus calles nos hace sentir como si volviéramos a siglos pasados.

Con su casco antiguo, perfectamente delimitado por las murallas, perderse por sus estrechas y cortas calles es muy fácil. 

Cultura. Historia. Son algunas de las palabras que mejor definen a la capital de la Provincia de Castilla-La Mancha, Toledo. En ella vivieron cristianos, musulmanes y judíos, y por eso es conocida como la «Ciudad de las Tres Culturas«.

Su centro histórico es una muestra aún viva de prácticamente todos los periodos de la historia: árabe, gótico, mudéjar, renacentista y barroco, ya que aún conserva muchos edificios con sus destacadas características.

¿Qué ver en Toledo en un día?

Toledo tiene un gran patrimonio arquitectónico y cultural, por eso durante vuestra visita debéis conocer los más emblemáticos. Estos son los principales lugares que hay que ver en Toledo:

  • La Iglesia de Santo Tomé (donde se encuentra la obra maestra de El Greco «El Entierro del Señor de Orgaz»)
  • La Sinagoga de Santa María la Blanca, una de las pocas sinagogas originales de la Edad Media que aún se conservan en la zona de Castilla
  • El Monasterio de San Juan de los Reyes, es considerado como el edificio más representativo del gótico toledano, fue mandado construir por los Reyes Católicos
  • La Mezquita del Cristo de La Luz, construida en el siglo X, la etapa de esplendor del Califato de Córdoba.
  • La Catedral de Toledo para descubrir todos las obras maestras del arte que alberga la «Catedral Primada de España».
  • Puerta de Bisagra puerta monumental situada en las murallas de la ciudad
  • Plaza Zocodoover. Es la plaza mayor. Una parte de ella fue diseñada por Juan de Herrera en tiempos del reinado de Felipe II. El origen de su nombre procede del árabe sūq ad-dawābb, que significa «mercado de bestias de carga». Antiguamente en esta plaza también se hacían las corridas de toros y se organizaban las cucañas en las fiestas de la localidad. 
  • Plaza del ayuntamiento

En Toledo podéis comprar la “Pulsera turística”, con la que podéis visitar 7 monumentos al precio de 9€. Entra aquí para saber más.

Si os interesa, podéis acercaros a conocer más de cerca la técnica del damasquinado, un trabajo de artesanía que consiste en la incrustación de hilos y láminas de oro y plata en acero o hierro, normalmente pavonado que forman figuras y dibujos.

En Toledo esta técnica se conoce también como Oro de Toledo y sirve como seña identificativa de la ciudad, donde todavía podemos encontrar productos artesanos damasquinados a mano como se hacía tradicionalmente pero en los últimos años su producción ha pasado a ser principalmente industrial, dado el nivel de producción que se demanda y se comercializa.

Toledo, ciudad de miradores

Abrazada por el río Tajo, Toledo es maestra en regalarnos unas vistas espectaculares desde sus numerosos miradores que se encuentran repartidos por toda la ciudad y que, inevitablemente, surgen desde los puntos más altos de la ciudad.

Recorriéndola, os encontraréis con unos cuantos que estoy segura que os mostrarán sus mejores estampas. Pero también hay que decir que las vistas desde abajo son espectaculares. No dejéis de incluirlas entre las cosas que hay que ver en Toledo.

Una de las mejores vistas las tenemos desde el Alcázar, que es uno de los puntos más altos de la ciudad. Se trata de un edificio muy representativo de la arquitectura renacentista española. Su situación privilegiada le dio un gran valor estratégico militar. Actualmente es sede del Museo del Ejército de Toledo.

¿Cómo llegar a Toledo?

Muchos se refieren a Toledo como una ciudad que ver “a los alrededores de Madrid” y, aunque sea cierto, no creo que se merezca ser referenciada de esta forma ya que creo que vale por sí sola y no solo como una ciudad “a una hora de Madrid”.

Sea de la forma que sea, llegar a Toledo es muy sencillo. Ya sea en coche o en cualquier otro medio de transporte. Desde Madrid, podréis coger un tren (más rápido) o bien un bus que sabe desde la estación de Plaza Elíptica (si tenéis el bono joven de transporte de la Comunidad de Madrid, os sale gratis el viaje y si no 9 euros ida y vuelta).

Dónde comer en Toledo

Para comer, os recomiendo el restaurante donde comí durante mi visita a Toledo, Taberna El Gallo. Situado en un callejón muy acogedor, nos atendieron muy bien a mí y a mi acompañante. La comida es variada, también tiene menú, lo que hace de este sitio un lugar perfecto para probar los mejores platos de la gastronomía manchega, como la perdiz estofada, la caldereta de cordero, arroz y truchas a la toledana, tiznao de bacalao, entre otros. Precio asequible, 17 euros comer con cañas y tapas previas incluidas.

De todas formas, Toledo es una ciudad con restaurantes muy buenos que ofrecen lo mejor de su gastronomía por un precio muy asequible. No creo que tengáis problemas en encontrar un buen sitio para comer 🙂

Toledo es sin dudarlo es una ciudad que desde el primer momento nos cautiva y hará que queramos volver para seguir descubriendo sus bonitos rincones y su apasionante historia. Yo ya tengo ganas de volver para volver a perderme por tus calles. ¿Os animáis?

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